Génesis 2:3
Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.
¿Eres de las personas que se toma tiempo libre para descansar? Dios que es todopoderoso, cuando terminó de hacer todas las cosas que existen, luego de seis días intensos de mucho trabajo, reposó. Y no creo que Dios estuviera cansado entonces, y que por eso hubiera requerido de un descanso. Más bien, creo que Dios dijo: he terminado, ahora contemplaré lo que he hecho.
Imagina que pasas todo el día cocinando, pero que no te detienes ni por un instante para probar lo que cocinas. No tiene lógica, ¿verdad? Pero generalmente no entendemos de las pequeñas y sencillas lecciones de la vida que nos enseñan a vivir.
Si meditas en la creación notarás que con ella se ha completado una semana, pero solamente si incluye el descanso. Sin embargo, ¿no bastaría solamente con el descanso de la noche para recuperar energías? Al parecer no. Dios, quien hace todas las cosas perfectas, establece la primera semana incluyendo un día completo de descanso. Pero nosotros creemos muchas veces ser más listos que Dios.
Aquí entra un debate muy interesante, que ha sido polémico por generaciones. ¿Es el sábado el día que deben guardar o reposar los cristianos? Si tú guardas el sábado como sebe ser, pienso que haces bien, pero eso no te hace mejor que el que guarda el domingo. Si eres judío, no es opción. Pero si eres cristiano, deberás saber que la ley se cumple perfectamente en Cristo, y que si intentas obtener tu salvación por medio de las cosas que haces (obras), entonces no habrás entendido nada acerca de salvación hasta el día de hoy, la cual es por gracia. La ley del sábado es para los judíos, y aún así guardar el sábado, no les salva, aunque sí les bendice.
Delante de Dios lo que cuenta es la intención de tu corazón, porque él hizo todos los días. Si guardas un día para el Señor eso sin duda le agradará, y si guardas todos los días para el Señor, igualmente, pero tu decisión es para contigo y con Dios, no para con los demás (Romanos 14:5-6). Sin lugar a dudas, el punto del descanso no es el día, sino el descanso en sí mismo. Marcos 2:27 nos dice lo que enseña Jesús acerca del día de reposo; indica que el día de reposo fue hecho para el hombre, y no el hombre para el día de reposo. Así que ahí está la clave. El día de reposo fue hecho para el hombre, para el bien del hombre, para el descanso, para la meditación, para la contemplación. Todos los otros días buscamos muchas cosas, pero ese día debemos buscar lo más importante: a Dios.
Para los cristianos que guardamos el domingo como día del Señor, entendemos que nuestro reposo es Cristo. No somos judíos, por eso no guardamos el sábado. Tampoco guardamos el domingo como reposo, porque hacemos muchas cosas, pero no las mismas que hacemos durante la semana. Podría decir que ningún otro día es tan activo en las obras de índole cristiana como el domingo.
Jesús es el verdadero reposo para el hombre. Mateo 11:28 presenta las palabras de Jesús en las que afirma que Él es el descanso de todos los trabajados y cargados.
El día de reposo es tan importante como los días de trabajo. Y Dios es Señor tanto del uno como de los otros. En teoría, buscamos a Dios todos los días, pero en el día de reposo nos dedicamos a buscarle, servirle, adorarle, contemplarle.
Obedecer a Dios es también considerar el descanso algo tan importante como el trabajo. Incluso el reposo está entre los diez mandamientos. Los que hacen cosas para Dios sin duda lo hacen para agradarle, pero los que descansan conforme a la voluntad de Dios también le agradan.
Para muchas cosas solemos decir que no tenemos tiempo, pero el tiempo es una de las cosas que se nos ha dado para administrar. Que no haya tiempo para el descanso, solo refleja los malos administradores que podemos ser. Por el contrario, el exceso de descanso puede convertirse en pereza, y la pereza tarde o temprano nos convierte en pobres, tanto de cosas materiales como de riqueza espiritual, ya que la pereza no es parte del diseño de Dios para el ser humano. De hecho, Dios sólo apartó un día de siete para el reposo, no tres, ni cinco. El balance que da el descanso en la noche mas el descanso del día de reposo es lo que produce salud, equilibrio, desarrollo de la mente y del cuerpo.
Observa que el descanso diario garantiza la energía física suficiente para el trabajo, pero el descanso del día de reposo garantiza la energía espiritual y el equilibrio emocional suficiente para la vida.
¿Y qué hacemos en el día de descanso? Algunos no hacen nada, otros hacen de todo. Para unos es el día de las tareas domésticas y para otros es el día de paseos y de visitas. Para mi es el día que dedico a Dios, a mi familia y a mi. Es el día para congregarme junto con aquellos con los que comparto mis creencias cristianas, y adoramos juntos a nuestro Padre Celestial. Es el día para ofrecer ayuda a otros y pasar tiempo junto con la familia. Es un día para adorar a Dios y para meditar en Su Palabra, así como compartirla.
Puedes dedicarte sólo a trabajar, y puede que llegues pronto a algún lado, pero cansado, agotado, sólo y vacío. Pero si tomas en serio el principio del descanso, llegaras en el momento oportuno al lugar adecuado, junto con las personas correctas, sano, fuerte y en óptimas condiciones para disfrutar por mucho tiempo tus logros. El descanso adecuado produce salud, belleza y equilibrio.
Pido a Dios que a partir de ahora puedas tomar en serio tu descanso, darle el valor que merece. Y también que encuentres verdadero descanso de todas tus cargas en Cristo Jesús, acercándote a Él. ¡Hey! Es Él mismo quien pide que le des tus cargas. Y como respuesta verás que sí hay tiempo para buscarle, para amarle, para servirle. Cuando buscas primeramente a Dios y Su justicia, todo lo demás viene por añadidura (Mateo 6:33). No te afanes por conseguirlo todo pronto, sacrificando tu descanso, o lo que es peor, sacrificando tu relación con Dios. Mejor descansa en Dios, y toma tiempo para reposar oportunamente.
Dios bendijo el descanso, para que fuese una bendición en tu vida y para que en reposo le busques con todo tu corazón. Recibe esta bendición de parte de Dios, y has planes en tu día de reposo, Él ya arregló una cita contigo esta semana. Búscale, adórale, ámale. Él es tu reposo, Él es tu descanso, Él es tu fuerza.